Hay animales a los que da un poco más de reparo matar, ¿por qué?, porque su naturaleza no es eminentemente agresiva hacia las personas. Es decir, que únicamente han de temerlos los vegetales. En cambio, luego están esas criaturas que aunque tampoco merezcan un viaje al otro barrio por la vía rápida, al menos en su caso las tornas quedan más igualadas. ¿Por qué?, porque si ellos pudieran el cazado serías tu. Animales como los dinosaurios, los tiburones, los leones y los cocodrilos. El temible cocodrilo es un auténtico residuo de épocas prehistóricas. Es fiero, veloz, tiene bastante mal genio y unos dientes peores que cuchillos. Déjate atrapar por un cocodrilo y verás qué divertido. Justamente por eso los juegos de matar cocodrilos quedan medianamente justificados, porque en este caso se trataría en esencia de supervivencia. Enfrentarte a un cocodrilo en su terreno y acabar con él tiene que ser toda una experiencia de esas que mandan tu adrenalina a dar una excursión de altos vuelos, cosa que experimentarás, aunque no tan intensamente, en estos juegos de matar cocodrilos.
